WERNER GUTIÉRREZ: EL GOBIERNO ES CÓMPLICE EN EL CONTRABANDO DE ALIMENTOS
María Beatriz Parilli Ultima Hora Digital
El
cierre parcial de la frontera con Colombia para evitar el contrabando de
extracción, es visto por el asesor agroalimentario Werner Gutiérrez, como una
medida que ataca las consecuencias pero no las causas de las fallas en la
distribución de alimentos, gasolina y otros productos en Venezuela, donde cree
que tenderá a fortalecerse el desvío hacia el vecino país, mientras exista la
complicidad de los efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB).
“Desde ya se vislumbra que esta medida es un nuevo fracaso en las políticas internas, ya que es una situación que lejos de solventar la extracción de alimentos y otros productos, la va a potenciar por los caminos verdes. Cerrar la frontera aérea y terrestre en horario nocturno, simplemente es decirle al país que los alimentos salían precisamente por las fronteras vigiladas por las FANB y que el Gobierno es cómplice del contrabando”, dijo.
Para frenar el contrabando, la administración del presidente Nicolás Maduro debe resolver las distorsiones económicas en Venezuela, ya que mientras la moneda nacional no valga frente al peso colombiano, seguirá siendo un negocio comprar productos en este país para venderlos en Colombia, de acuerdo con lo afirmado por el asesor agroalimentario.
Gutiérrez señaló que la causa de la escasez de alimentos, es la destrucción del aparato productivo interno, situación que viene siendo advertida desde hace cinco años y que en la actualidad “ha quedado desnuda ante la fuerte sequía que atraviesan al menos 9 estados del país, donde se ha visto afectado el sector agropecuario, con la muerte del ganado y la disminución de la superficie de siembra de rubros como el maíz”.
Alarma
Si se cumplen las probabilidades de que en el segundo semestre del año se desarrolle el fenómeno El Niño, el experto cree que se generará una “alarma exacerbada” en el sector agropecuario, ya que no se tendrá agua hasta el próximo año, dejando sin pasto ni alimentos a los animales y los campos muy secos y sin condiciones para que se pueda sembrar girasol, ajonjolí y arroz en el ciclo norte-verano, por lo que el 2015 serán aún más graves las fallas en la oferta de alimentos.
No obstante, la posibilidad de que se produzca el fenómeno climatológico ha bajado de 80% a 65%, por lo que si llueve en lo que queda de año, se llevaría a cabo normalmente la siembra norte-verano y habría una recuperación en el área ganadera, “si el Ejecutivo garantiza la disponibilidad de alimentos y, principalmente, de insumos, los cuales se empeña en cubrir en un 100% a través de Agropatria, pese a que no tiene sentido insistir en una política en la que no ha sido eficiente”, acotó Werner Gutiérrez.
“Desde ya se vislumbra que esta medida es un nuevo fracaso en las políticas internas, ya que es una situación que lejos de solventar la extracción de alimentos y otros productos, la va a potenciar por los caminos verdes. Cerrar la frontera aérea y terrestre en horario nocturno, simplemente es decirle al país que los alimentos salían precisamente por las fronteras vigiladas por las FANB y que el Gobierno es cómplice del contrabando”, dijo.
Para frenar el contrabando, la administración del presidente Nicolás Maduro debe resolver las distorsiones económicas en Venezuela, ya que mientras la moneda nacional no valga frente al peso colombiano, seguirá siendo un negocio comprar productos en este país para venderlos en Colombia, de acuerdo con lo afirmado por el asesor agroalimentario.
Gutiérrez señaló que la causa de la escasez de alimentos, es la destrucción del aparato productivo interno, situación que viene siendo advertida desde hace cinco años y que en la actualidad “ha quedado desnuda ante la fuerte sequía que atraviesan al menos 9 estados del país, donde se ha visto afectado el sector agropecuario, con la muerte del ganado y la disminución de la superficie de siembra de rubros como el maíz”.
Alarma
Si se cumplen las probabilidades de que en el segundo semestre del año se desarrolle el fenómeno El Niño, el experto cree que se generará una “alarma exacerbada” en el sector agropecuario, ya que no se tendrá agua hasta el próximo año, dejando sin pasto ni alimentos a los animales y los campos muy secos y sin condiciones para que se pueda sembrar girasol, ajonjolí y arroz en el ciclo norte-verano, por lo que el 2015 serán aún más graves las fallas en la oferta de alimentos.
No obstante, la posibilidad de que se produzca el fenómeno climatológico ha bajado de 80% a 65%, por lo que si llueve en lo que queda de año, se llevaría a cabo normalmente la siembra norte-verano y habría una recuperación en el área ganadera, “si el Ejecutivo garantiza la disponibilidad de alimentos y, principalmente, de insumos, los cuales se empeña en cubrir en un 100% a través de Agropatria, pese a que no tiene sentido insistir en una política en la que no ha sido eficiente”, acotó Werner Gutiérrez.
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