José Guerra: El problema en Venezuela no es de distribución, sino de producción
María José Aguilar Ultima Hora Digital
La harina, arroz, leche, azúcar, papel higiénico, café,
margarina, aceite, pollo, carne, champú, jabón de tocador y detergente, son
algunos de los 23 rubros que serán controlados a través del Sistema Biométrico
que deberá estará instalado el próximo 30 de noviembre en las redes de
supermercados y farmacias del país, con el propósito de eliminar las colas y
frenar la reventa de productos.
El economista José Guerra, aseguró que el Sistema Biométrico no solucionará el desabastecimiento de alimentos en Venezuela, “porque el problema que tenemos no es de distribución, sino de producción. No tenemos suficiente comida y por eso tienen que racionarla”.
-Eso no va a resolver nada, es un control inaceptable, afirmó el economista, al agregar que lo que va a generar son más problemas como corrupción, restricción en la venta de alimentos “porque se están poniendo límites, además implica gastos enormes por el costo de las máquinas captahuellas”.
Guerra indicó, que es importante que los venezolanos se pregunten por qué en otros países, a excepción de Cuba, no usan un sistema de registro para comprar alimentos y productos de primera necesidad. “Por qué no usan esa máquina en Colombia, Perú, en Brasil, en Haití, Costa Rica o Guatemala, por ejemplo, es porque tienen suficiente comida y producción; esa es la realidad”.
Más complicado
José Guerra dijo que los pequeños comerciantes que venden comida, como las areperas, también se verán afectados por esos controles. “Una persona que vende arepas, cuántas bolsas de harina le venderán semanalmente o es que van a crear un registro de los comercios”, se preguntó.
En definitiva, -manifestó- es una complicación, es una tarjeta de racionamiento y lo mejor es que haya suficiente producción para que la gente compre lo que quiera.
El economista José Guerra, aseguró que el Sistema Biométrico no solucionará el desabastecimiento de alimentos en Venezuela, “porque el problema que tenemos no es de distribución, sino de producción. No tenemos suficiente comida y por eso tienen que racionarla”.
-Eso no va a resolver nada, es un control inaceptable, afirmó el economista, al agregar que lo que va a generar son más problemas como corrupción, restricción en la venta de alimentos “porque se están poniendo límites, además implica gastos enormes por el costo de las máquinas captahuellas”.
Guerra indicó, que es importante que los venezolanos se pregunten por qué en otros países, a excepción de Cuba, no usan un sistema de registro para comprar alimentos y productos de primera necesidad. “Por qué no usan esa máquina en Colombia, Perú, en Brasil, en Haití, Costa Rica o Guatemala, por ejemplo, es porque tienen suficiente comida y producción; esa es la realidad”.
Más complicado
José Guerra dijo que los pequeños comerciantes que venden comida, como las areperas, también se verán afectados por esos controles. “Una persona que vende arepas, cuántas bolsas de harina le venderán semanalmente o es que van a crear un registro de los comercios”, se preguntó.
En definitiva, -manifestó- es una complicación, es una tarjeta de racionamiento y lo mejor es que haya suficiente producción para que la gente compre lo que quiera.
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