María Beatriz Parilli Ultima Hora Digital
Los
productores agrícolas que sembraron maíz y arroz en el ciclo invierno 2014, se
mantienen preocupados porque el precio de ambos rubros no se ha definido aun
cuando falta casi un mes para que inicie la cosecha, por lo que esperan que el
incremento se materialice en los próximos días, pero no a través de un nuevo
subsidio, ya que el Gobierno no ha cancelado parte de la subvención aprobada el
año pasado.
La compensación adicional que el Ejecutivo aprobó al precio del maíz y arroz del pasado ciclo invierno, aún se le adeuda a una pequeña parte de los agricultores, incluyendo algunos afiliados a la Asociación de Productores de Ospino (Asospino), según aseguró su presidente, Oscar Montenegro.
El productor considera importante que se desmonte la política de subsidio, con base a los retrasos en el cobro del anterior. “Tenemos malas experiencias, porque al momento en que nos cancelan el dinero, prácticamente se disuelve, ya que va perdiendo valor en el tiempo.
La compensación adicional que el Ejecutivo aprobó al precio del maíz y arroz del pasado ciclo invierno, aún se le adeuda a una pequeña parte de los agricultores, incluyendo algunos afiliados a la Asociación de Productores de Ospino (Asospino), según aseguró su presidente, Oscar Montenegro.
El productor considera importante que se desmonte la política de subsidio, con base a los retrasos en el cobro del anterior. “Tenemos malas experiencias, porque al momento en que nos cancelan el dinero, prácticamente se disuelve, ya que va perdiendo valor en el tiempo.
Todavía a nosotros nos están pagando o completando los recursos, lo
que impide que podamos hacer inversiones en el momento en que se requieren”,
dijo.
Montenegro también se mostró contrario a que los precios de los rubros se definan con anterioridad a la cosecha, incluso antes de la siembra.
Montenegro también se mostró contrario a que los precios de los rubros se definan con anterioridad a la cosecha, incluso antes de la siembra.
Espera que alrededor del 100% de
incremento en los costos de producción sea trasladado al monto de venta de
ambos cereales, tomando en cuenta que “el valor de la maquinaria es
prácticamente inalcanzable y tuvimos más gastos por mano de obra, ya que hemos
contratado más personal porque se nos redujo el horario laboral por la Ley
Orgánica del Trabajo”.
A nivel nacional, representantes de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedeagro), han afirmado que el Ejecutivo está al tanto de la estructura de costos de los rubros cerealeros, estimando también que los subsidios deberían eliminarse y pagarse la compra de la cosecha por la vía del precio, para que se pueda recuperar la rentabilidad del sector.
El año pasado, por kilo de maíz blanco, el agricultor recibió 3,95 bolívares, ya que al precio de Bs. 2,20 se le adicionó Bs. 1,75 que fue por la vía del subsidio. En el caso del maíz amarillo, el ingreso fue de Bs. 3,62, sumando una subvención de Bs. 1,72 al monto de venta que estuvo en Bs. 1,90.
En el arroz, el último ingreso correspondiente a la cosecha se desarrolló entre enero y julio de este año, los productores percibieron un total de 7,20 bolívares por kilo de arroz paddy, cuyo precio se mantuvo en Bs. 2,50, a los que se les adicionó un subsidio de Bs. 4,70.
Proyecciones (Texto para entrelíneas)
Sobre las proyecciones para la cosecha de maíz del ciclo invierno, el presidente de Asospino tiene buenas expectativas, pues a pesar de la sequía inicial, las posteriores lluvias y algunas fallas en los insumos, la asociación logró sembrar 7.500 hectáreas, lo que representa 3.000 más que el año pasado.
A nivel nacional, representantes de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedeagro), han afirmado que el Ejecutivo está al tanto de la estructura de costos de los rubros cerealeros, estimando también que los subsidios deberían eliminarse y pagarse la compra de la cosecha por la vía del precio, para que se pueda recuperar la rentabilidad del sector.
El año pasado, por kilo de maíz blanco, el agricultor recibió 3,95 bolívares, ya que al precio de Bs. 2,20 se le adicionó Bs. 1,75 que fue por la vía del subsidio. En el caso del maíz amarillo, el ingreso fue de Bs. 3,62, sumando una subvención de Bs. 1,72 al monto de venta que estuvo en Bs. 1,90.
En el arroz, el último ingreso correspondiente a la cosecha se desarrolló entre enero y julio de este año, los productores percibieron un total de 7,20 bolívares por kilo de arroz paddy, cuyo precio se mantuvo en Bs. 2,50, a los que se les adicionó un subsidio de Bs. 4,70.
Proyecciones (Texto para entrelíneas)
Sobre las proyecciones para la cosecha de maíz del ciclo invierno, el presidente de Asospino tiene buenas expectativas, pues a pesar de la sequía inicial, las posteriores lluvias y algunas fallas en los insumos, la asociación logró sembrar 7.500 hectáreas, lo que representa 3.000 más que el año pasado.
Sin embargo, exhortó a las
autoridades a atender los problemas de vialidad en la zona rural, para que no
se vaya a retrasar el período de recolección del grano.
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