Controles acentúan escasez

Los últimos 4 años, el índice de escasez más bajo se registró en agosto de 2010, cuando llegó a 9% porque se liberaron los precios de varios alimentos.

KATIUSJA HERNÁNDEZ      EL NACIONAL

Los controles de precios y de cambio profundizan la escasez de productos y afectan la prestación de servicios. La flexibilización o eliminación de las restricciones contribuyen a reducir las faltas que se presentan en el mercado. El control cambiario afecta en menor cuantía porque Cadivi entrega los dólares, aunque se retrase. Los últimos 4 años, el índice de escasez más bajo se registró en agosto de 2010, cuando llegó a 9% porque se liberaron los precios de varios alimentos. 

Entre 2007 y 2010 cerca de 20 alimentos fueron excluidos del control de precios: Atún, salsa de tomate, harina de trigo, mayonesa, pernil, chuleta ahumada de cerdo, mortadela, lentejas, arvejas, caraotas, avena, sal y jurel, entre otros, además de los cortes de carne para parrilla. 

En esa oportunidad, Félix Osorio ocupaba por primera vez el Ministerio de Alimentación y declaraba que se había acordado una política de precios sugeridos, una especie de libertad condicional en los precios, que generó que la escasez se redujera momentáneamente. 

El economista Ángel Alayón señaló que cuando los controles son muy rígidos y prolongados, sin un mecanismo para la revisión, se desestimula la producción y se genera escasez. 

"Cuando hay un incremento de los precios, los productores pueden recuperar sus costos e invertir", expresó. 

Entre 2011 y parte de 2013 el control de precios se constituyó en una política de congelamiento. Muchos rubros tenían más de dos años sin revisión, hasta que fueron aumentados entre mayo y agosto como el pollo, la carne de res, las pastas y el pan de trigo, mientras que otros siguen sin revisión como el aceite y los 19 productos de cuidado personal, limpieza del hogar y consumo. 

Armando León, director del Banco Central de Venezuela, declaró en julio a Globovisión: "Lo que no puede suceder es que se dejen unos precios, además de manera fantástica, sin modificarse, creyendo que eso es un mecanismo para combatir la inflación. Eso no es combatir la inflación, que se deje un precio fijo por dos años o dos años y medio, eso es un absurdo".