El déficit en la producción de carne y leche, llama a los ganaderos a
solicitar al Ejecutivo un gran diálogo nacional en el que se convoque a todos
los actores de la cadena agropecuaria, para sincerar las cifras, plantear los
problemas y diseñar los planes y estrategias, como única salida a la crisis
productiva que se vive actualmente y que perjudica a la población al disminuir
la cantidad de alimentos “hechos en casa”.
“Si no se toman cartas en el asunto urgentemente y se convoca a todos los productores de Venezuela, el futuro del agro es bastante incierto. Tenemos la necesidad de que haya un diálogo con el Gobierno, porque hay dificultades que si no se solucionan nos impedirán que podamos aumentar la producción de carne y leche”, dijo Ciro Labarca, presidente de la Asociación de Ganaderos de Colón (Aganaco), en el Sur del Lago, estado Zulia.
En el país, según el ganadero, apenas se cubre con producción nacional el 50% del consumo de carne y leche, siendo aún más grave en la zona del Sur del Lago, donde la expropiación de más de 20 mil hectáreas cercó la actividad agropecuaria que sólo genera un 40% de lo que se producía cuando las tierras no estaban en manos del Estado.
“Lo más grave es que desde hace más de siete años, Venezuela no pulveriza leche. Toda la leche en polvo que se consume en el país es importada porque el Gobierno no ha dado un precio para que las plantas pulverizadoras nacionales compitan con un margen de rentabilidad”, señaló.
La primera necesidad que el dirigente gremial considera que se debe atender para estimular a los ganaderos a incrementar la producción, es que sean revisados los precios de la carne y la leche, a fin de que se fijen unos montos que se correspondan a la estructura de costos, y así se pueda ir eliminando las distorsiones existentes en la comercialización de ambos rubros, y sus derivados.
Escasez
Otro tema que apremia al sector agropecuario es la escasez de maquinaria, implementos agrícolas e insumos, tras los retrasos en el otorgamiento de dólares para que las casas comerciales del país cancelen a los proveedores internacionales.
“Nos está afectando bastante el hecho de que hayan problemas para adquirir una maquinaria, agroinsumos o un simple repuesto. Cuesta conseguir un solo implemento de estos tanto en las empresas privadas como en la misma Agropatria que cada vez está peor”, afirmó.
Labarca sostuvo que las pocas veces que los ganaderos logran conseguir un equipo o insumo agrícola, es porque tiene contacto con los mismos funcionarios del Gobierno que en determinado momento le facilita un tractor o un agroquímico.
A raíz de esta situación, el mantenimiento de los potreros -así como otras labores agropecuarias-, es cada día más difícil y costoso, ya que constantemente aumenta el precio de las piezas y equipos, tras el alto índice inflacionario que existe en el país, según el presidente de Aganaco.
“También tenemos que enfrentar la escasez de mano de obra. Una gran parte del personal de campo en el Sur del Lago, es de Colombia y la gente de allá no quiere ir a Venezuela porque el poder adquisitivo del bolívar ha disminuido. A los colombianos lo les resulta atractivo nuestro mercado y eso ha influido en que bajemos nuestra productividad”, apuntó.
Flexibilizar
El presidente de Aganaco quiere que el diálogo con el Ejecutivo dé resultado mediante la puesta en marcha de los acuerdos que se lleguen con los productores, y que no se trate de un simple “monólogo”, en el que no se concreten las ofertas.
Ciro Labarca precisó que entre las peticiones de los ganaderos, está que se flexibilicen los controles de compra y venta de los predios, ya que actualmente existe la prohibición de comercializarlas. “Además, desde el Instituto Nacional de Tierras (INTI), se nos están colocando trabas en cuanto al otorgamiento del registro de propiedad, requisito indispensable a la hora de optar a un crédito”, acotó.
“Si no se toman cartas en el asunto urgentemente y se convoca a todos los productores de Venezuela, el futuro del agro es bastante incierto. Tenemos la necesidad de que haya un diálogo con el Gobierno, porque hay dificultades que si no se solucionan nos impedirán que podamos aumentar la producción de carne y leche”, dijo Ciro Labarca, presidente de la Asociación de Ganaderos de Colón (Aganaco), en el Sur del Lago, estado Zulia.
En el país, según el ganadero, apenas se cubre con producción nacional el 50% del consumo de carne y leche, siendo aún más grave en la zona del Sur del Lago, donde la expropiación de más de 20 mil hectáreas cercó la actividad agropecuaria que sólo genera un 40% de lo que se producía cuando las tierras no estaban en manos del Estado.
“Lo más grave es que desde hace más de siete años, Venezuela no pulveriza leche. Toda la leche en polvo que se consume en el país es importada porque el Gobierno no ha dado un precio para que las plantas pulverizadoras nacionales compitan con un margen de rentabilidad”, señaló.
La primera necesidad que el dirigente gremial considera que se debe atender para estimular a los ganaderos a incrementar la producción, es que sean revisados los precios de la carne y la leche, a fin de que se fijen unos montos que se correspondan a la estructura de costos, y así se pueda ir eliminando las distorsiones existentes en la comercialización de ambos rubros, y sus derivados.
Escasez
Otro tema que apremia al sector agropecuario es la escasez de maquinaria, implementos agrícolas e insumos, tras los retrasos en el otorgamiento de dólares para que las casas comerciales del país cancelen a los proveedores internacionales.
“Nos está afectando bastante el hecho de que hayan problemas para adquirir una maquinaria, agroinsumos o un simple repuesto. Cuesta conseguir un solo implemento de estos tanto en las empresas privadas como en la misma Agropatria que cada vez está peor”, afirmó.
Labarca sostuvo que las pocas veces que los ganaderos logran conseguir un equipo o insumo agrícola, es porque tiene contacto con los mismos funcionarios del Gobierno que en determinado momento le facilita un tractor o un agroquímico.
A raíz de esta situación, el mantenimiento de los potreros -así como otras labores agropecuarias-, es cada día más difícil y costoso, ya que constantemente aumenta el precio de las piezas y equipos, tras el alto índice inflacionario que existe en el país, según el presidente de Aganaco.
“También tenemos que enfrentar la escasez de mano de obra. Una gran parte del personal de campo en el Sur del Lago, es de Colombia y la gente de allá no quiere ir a Venezuela porque el poder adquisitivo del bolívar ha disminuido. A los colombianos lo les resulta atractivo nuestro mercado y eso ha influido en que bajemos nuestra productividad”, apuntó.
Flexibilizar
El presidente de Aganaco quiere que el diálogo con el Ejecutivo dé resultado mediante la puesta en marcha de los acuerdos que se lleguen con los productores, y que no se trate de un simple “monólogo”, en el que no se concreten las ofertas.
Ciro Labarca precisó que entre las peticiones de los ganaderos, está que se flexibilicen los controles de compra y venta de los predios, ya que actualmente existe la prohibición de comercializarlas. “Además, desde el Instituto Nacional de Tierras (INTI), se nos están colocando trabas en cuanto al otorgamiento del registro de propiedad, requisito indispensable a la hora de optar a un crédito”, acotó.
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