Carlos Albornoz: Hay que evitar que los campesinos paguen por la falta de planificación

María Beatriz Parilli   Ultima Hora Digital

Tomando en cuenta que este ciclo invierno ha afectado “fuertemente” el rebaño nacional, la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga) instó al Ejecutivo a tomar las debidas previsiones ante la sequía y definir la logística para el año agropecuario 2015, a fin de evitar que los “campesinos paguen con su patrimonio la falta de planificación”.

Carlos Albornoz, vicepresidente de Fedenaga, refirió que el sector está a la espera de que se activen los comités de contingencia que harán seguimiento a los efectos de la sequía en algunos estados agropecuarios, para que no sólo ataquen la coyuntura que se registra en los actuales momentos, sino de ir planificando y tomando las previsiones para el próximo año.

Pese a los problemas que ha traído la disminución de las lluvias en varias entidades del país, precisó que generalmente en el ciclo invierno se da la mayor oferta forrajera para el alimento del ganado, por lo que hay que tratar de conservarlo, en función de que no escasee en el período de verano cuando tiende a disminuir por la intensificación de la sequía.

Precisó que la cantidad de ganado bovino afectado supera los 2 millones de reses, que se suman a los animales que han muerto a consecuencia de la sequía, que en el caso del estado Guárico ocasionó que fallecieran más de 41 mil animales y que se dejaran de sembrar 200 mil hectáreas menos que en el 2007, aunado a los problemas que se han tenido con el acopio de insumos, según indicó Albornoz.

El dirigente destacó que en los últimos 10 días han mejorado las condiciones climáticas en los estados donde se desarrolló un fuerte verano, lo que podría detener o mitigar un poco las afectaciones en el ganado que había presentado una desmejora en su condición por problemas nutricionales, al carecer de pasto y alimentos.

“Este es un momento de ‘stand by’. Sin embargo, toca estar muy previsivos por lo que se viene en el resto del año, ya que a partir de octubre va a haber una profunda caída en las precipitaciones y si los pastos no se recuperan, se acentuará la afectación corporal de los animales, lo que sin duda traerá consecuencias negativas en febrero, marzo y abril del próximo año”, dijo.

Albornoz aseguró que independientemente de que se decrete una emergencia por la sequía, lo que se necesita es tomar las previsiones en cuanto a insumos, maquinaria, alimentos balanceados, realizar convenios con los centrales azucareros para que les garanticen la disponibilidad de melaza para los animales, entre otros planes. “No necesitamos un estado de emergencia, sino condiciones y herramientas para poder producir”.

Rigores 

El vicepresidente de Fedenaga manifestó que las cifras de animales muertos son secundarias, ya que históricamente cuando hay sequía ocurre el deceso del rebaño. 

“Lo alarmante en todo caso, es la cantidad que ha perecido en tan poco tiempo (…) estas son cosas sobre las cuales no tiene la culpa nadie, pero hay que abocarse responsablemente a evitar que sigan ocurriendo, considerando que el campesinado es el que sufre los rigores de la sequía, por lo que no será desconociendo la realidad como vamos a solventar el problema que vive el sector”.

También destacó que el Ministerio de Agricultura y Tierras (MAT) no puede desestimar decretar una emergencia, con el argumento de que el Insai ha reportado la muerte de menos del 1% del rebaño nacional, ya que tradicionalmente los productores no ponen al tanto a ese organismo sobre la muerte del ganado, a menos que sea por problemas de enfermedades u otras anomalías.