Importación de café de Nicaragua decreta la muerte del rubro en el país

Daniel España  Ultima Hora Digital

El concejal Víctor Moreno, vicepresidente del Concejo Municipal de Sucre, como vocero de las 3.335 familias que viven de la producción cafetalera en esa jurisdicción, expresó la preocupación que hay por la aparente intención del Ejecutivo nacional de importar café de Nicaragua a cambio de petróleo.

Afirma que esa medida decreta la muerte de la caficultura en el país y con ello la estabilidad económica y social de esas familias en el municipio Sucre que,  desde ya,  se declaran en quiebra por las malas políticas gubernamentales.

-Hay que hacer memoria de los planes fracasados del Gobierno. El Plan Café puesto en marcha en 2001 y  que arrancó con la bicoca de 300 millardos de bolívares para su ejecución no funcionó; se decía que para el 2005  veríamos los primeros resultados y que incluso estaríamos exportando café a otros países como Estados Unidos, Europa y Japón, pero nada de eso ocurrió.

Desde su óptica, en Venezuela la falta de gerencia se convirtió en la peor pesadilla para los caficultores, quienes en la actualidad están sumergidos en la pobreza y por ello han tenido que dedicarse a otras actividades como criar ganado o incluso,  abandonar sus fincas para trabajar como mototaxistas y  poder sobrevivir.

Agrega el edil, que la producción cafetalera se ha visto afectada,  además,  por enfermedades como la roya,  el aumento de los insumos agrícolas y la falta de mano de obra y de asistencia técnica y crediticia “y como guinda de la torta el gobierno decide importar casi 70 mil sacos del grano nicaragüense”.