Declaran en "emergencia" al cultivo de caña de azúcar
Maria Beatriz Parilli Ultima Hora Digital
Los productores afiliados a la Federación de Asociaciones de Cañicultores de Venezuela (Fesoca) declararon al cultivo de caña de azúcar “en emergencia nacional”, ante los problemas económicos que atraviesan durante esta zafra, afectada además por la falta de equipos, repuestos e insumos agrícolas para cortar y movilizar la materia prima a los centrales.
Con el último incremento al precio del kilo de azúcar, fijado en 26,50 bolívares, el ingreso de los cañicultores “en el mejor de los casos” se ubica en Bs. 13, con lo que “no llegamos ni siquiera a cubrir nuestros costos de producción”, según explicó José Ricardo Álvarez, presidente de Fesoca, en una rueda de prensa efectuada en la sede del gremio, en Caracas.
Fesoca estima que el precio del azúcar a nivel de consumidor debe superar los Bs. 50 para que el ingreso de los cañicultores supere los Bs. 25, y así permitir la “subsistencia del sector”, “seguir en la actividad” y “terminar la zafra más o menos decente”, a pesar de que los costos se elevan a cada momento, por los efectos inflacionarios que se registran en el país.
Los cañicultores tienen un rezago de Bs. 8 con respecto al ingreso actual y el que deberían percibir. Natanael Mavare, vicepresidente de Fesoca, señaló que el pasado 23 de febrero, el viceministro de Agricultura, Agustín Ridell, prometió que en un lapso de ocho días se aprobaría un subsidio para los agricultores, propuesta que luego fue ratificada por el ministro de Agricultura y Tierras, José Luis Berroterán, pero a la fecha no se ha hecho efectivo.
“No tenemos respuesta de nada, por lo que se decidió declararnos en emergencia en vista que la zafra ya casi está por culminar en Portuguesa, que es el estado que produce la mayor parte de la caña de azúcar que se genera en el país. Los agricultores le estamos quedando mal al sistema bancario porque no podemos cubrir los préstamos. La intención es producir; no hacerlo afectaría a nuestras familias”, alega el gremio.
Los cañicultores también han tenido que sacar adelante esta zafra, sin tener todas las herramientas a la mano. Según Mavare, el sector registra un déficit de 73 cosechadoras y 150 camiones, además de que amerita una importante inversión en materia de repuestos, debido a que parte de los equipos que tienen los productores están paralizados por falta de piezas.
“No tenemos equipos suficientes. Este año no llegaron máquinas ni camiones nuevos para hacer la cosecha, así que nos estamos muriendo de mengua y queremos hacer un llamado al Gobierno nacional para que tome acciones inmediatas y que no muera este sector tan importante para la economía de la zona rural y la provincia del país”, alertó Álvarez.
Retroceso
El gremio nacional de cañicultores lamentó el retroceso que estima se registre en la zafra 2014-15, cuya producción estaría entre los 5 millones y 5,500 millones de toneladas de caña que equivaldrían a 300 mil tons. de azúcar, lo que representa un tercio del consumo nacional que se ubica en 1,200 millones de tons.
“Estamos en los niveles de producción de los años 80. Habría que importar unas 900 mil toneladas para cubrir el consumo nacional, ya que nuestra producción solo alcanza para un 30%. Queremos que haya una política económica definida para el sector y que se evite que todos los años estemos en este trance de pedir precios y mejoras para el circuito azucarero”, dijo Natanael Mavare.
Para esta zafra, Fesoca calcula que se queden diferidas alrededor de 500 mil toneladas de caña. Según el gremio los centrales azucareros privados están operando efectivamente, a diferencia de algunas factorías públicas que tienen problemas por la falta de repuestos e insumos de fábrica.
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