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4 ene 2015

Cinco mil reses desaparecen por mortalidad y ventas forzadas en la COL

En Miranda estiman baja de producción en 60 por ciento y salida de la mitad de la población bovina. El trabajo publicado el 3 de agosto destapó la problemática que sufrieron por meses los productores agropecuarios del estado Zulia, debido a la sequía.

La Verdad   Yasmin Ojeda

Los efectos del verano y falta de alimento para las vacas brotan en el municipio Miranda. Cinco mil reses ya desaparecieron de la Costa Oriental. La mayor incidencia está en dos parroquias: Farías y Ana María Campos, determinó la Asociación de Ganaderos de la Costa Nororiental del Lago.
En las fincas El Cerro y Las Dolores, frontera entre Ana María Campos (Mecocal) y Altagracia (Los Puertos) suman na mortalidad en aumento. En la tierra que hasta diciembre mostraba rápidas excavaciones para construir jagüey, ante la falta de sistema de agua, se cuentan las reses muertas en el camino. “Solo en uno hay cinco vacas muertas. Cayeron y no se levantaron más”, recuerda José Suárez, trabajador.
Además de la mortalidad, las “ventas forzadas” causaron la baja. Se venden lecheras para “no perder todo”, lamenta Antonio César Reyes, directivo de Aganorla. La condición corporal disminuyó por la falta de pasto fresco y fibras. Lo que ocasionó otro efecto: “la producción de leche cayó 66 por ciento”.
El ordeño de 600 litros de leche al día “está en 200 litros”. Se alerta una “crisis grave” a futuro. “Recuperar una finca será en cinco años, porque los animales que se fueron no volverán”, dice el directivo.
Con animales “débiles” se apuró la venta hacia Sur del Lago, donde ya se movilizan 50 mil cabezas para aliviar. “Una finca que tenía 400 animales, ahora tiene 200”.
Los datos los tiene el Ministerio de Agricultura y Tierras, la Gobernación “y Agropatria, que levantó estadísticas” de la zona.
Esteban Cabrera, agropecuario, cuenta en los potreros las vacas paridas a las que limitan el ordeño para salvar a los becerros. Intenta mantener un plan de alimentación en reserva.
Las lecheras que daban entre 10 y 15 litros diarios “ahora están en tres o dos litros de leche, y dejamos que el becerro siga alimentándose para salvar la cría porque no hay pasto que darles”.
En cifras
3 meses tardaría en cultivarse pastos para ganado.
180 bolívares cuesta una pipa de melaza de 20 litros para complementar la alimentación.
50 por ciento bajó el precio de una res, de 20 mil bolívares a 10 mil.

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