Variables clave para calidad de vida tienen inflación sobre 60%

Nicolás Maduro retrasa la implementación del plan de ajuste.

VÍCTOR SALMERÓN |  EL UNIVERSAL

El incesante incremento de los precios impacta a la población en variables que resultan clave al momento de definir si una familia milita en el ejército de la pobreza.

Los datos del Banco Central señalan que entre mayo de 2013 y mayo de este año el costo de los alimentos acumula un salto de 76,2%, el precio del transporte 74%, el vestido 61% y los servicios médicos 47%.

En 2013 la inflación registró un salto de 56% y el impacto sobre la capacidad de compra fue tal que la pobreza, medida por ingresos, experimentó un alza de 6,1 puntos porcentuales y 1,7 millones de personas cayeron debajo de la linea que separa a quienes tienen suficiente dinero para cubrir las necesidades básicas.

Todo apunta a que este año la inflación será mayor a la de 2013 y por ende puede esperarse un nuevo incremento de la pobreza. En los primeros cinco meses la inflación acumula un salto de 23% mientras que en el mismo lapso de 2013 fue de 19,4%.

En la historia

La inflación experimenta aumentos que durante los últimos 34 años solo son superados por el registrado en 1989 cuando Carlos Andrés Pérez se vio forzado a aplicar un severo ajuste para corregir los desequilibrios heredados del gobierno de Jaime Lusinchi y por el período 1994-1995, cuando una profunda crisis bancaria llevó a la administración de Rafael Caldera a emitir bolívares sin respaldo para auxiliar al sistema financiero.

En esta oportunidad el Banco Central está imprimiendo grandes cantidades de billetes sin respaldo para financiar al Gobierno a través de la compra de bonos que emite Pdvsa porque el gasto público supera en 15% del PIB al ingreso.

La inyección de dinero impulsa la demanda pero la oferta no está en condiciones de responder porque las empresas no tienen suficiente materia prima por la escasez de divisas, caída de la producción en empresas estatizadas y precios controlados que no permiten cubrir los costos de producción.

En un entorno donde la demanda de divisas crece por un tipo de cambio artificialmente barato, la producción de Pdvsa está estancada, millones de dólares han sido entregados a empresas de maletín y los pagos de capital e intereses de la deuda externa aumentan, la economía sufre escasez de divisas.

Las medidas

El Gobierno tiene listo un plan de ajuste para estabilizar la economía pero aún no comienza a implementarlo.

La agenda contempla la unificación del tipo de cambio, el aumento del precio de la gasolina y las tarifas de la electricidad; la sinceración de precios en los productos controlados, la consolidación de los fondos en divisas para incrementar las reservas internacionales, recorte del gasto público y fin del financiamiento del Banco Central a Pdvsa.

Hasta ahora el Presidente de la República, Nicolás Maduro, no ha aprobado la puesta en marcha de estas medidas que en el corto plazo acelerarían la inflación y restarían impulso al crecimiento en momentos en que la economía venezolana está a las puertas de la recesión.

Si bien la ausencia de elecciones durante lo que resta de año hacen que el segundo semestre sea ideal para aplicar el ajuste, la caída en la popularidad del Presidente ha paralizado la toma de decisiones.

De acuerdo con un sondeo realizado por la firma Datanálisis entre el 31 de marzo y el 20 de abril ocho de cada diez venezolanos evalúa la situación del país como negativa y la popularidad de Maduro registra una caída de 13,4 puntos respecto al cierre de 2013 para ubicarse en 37%.

Francisco Rodríguez, analista de Bank of America, indica en su último reporte sobre Venezuela que "el gradualismo es la mayor amenaza para la estabilización macroeconómica".

Mientras más se tarde el ajuste, explica, más crecerán los desequilibrios.