Fedeagro aprueba acciones pacíficas ante la grave crisis agroalimentaria

MARÍA BEATRIZ PARILLI    Ultima Hora Digital

Representantes nacionales de Fedeagro se trasladaron ayer a Portuguesa, para realizar un directorio ampliado con sus afiliados, con quienes analizaron la crisis agroalimentaria, acordando acciones pacíficas en defensa de la sociedad y la cultura rural venezolana, y demandando un golpe de timón en las políticas dirigidas al sector, por parte del Gobierno al que le dijeron “basta de diplomacia; lo que se necesitan son resultados”.

En la Cámara de Comercio de Acarigua-Araure, se efectuó la reunión encabezada por Antonio Pestana, presidente de Fedeagro, quien aclaró que el directorio no se realizó para “tumbar al gobierno sino para darle a conocer al país la realidad del sector”, ya que absolutamente todos los rubros están “muy mal”, decreciendo a nivel de superficie de siembra, como es el caso de la caña de azúcar que cayó de 180 mil a 80 mil hectáreas; arroz, de 230 mil a 155 mil has. y maíz que bajó de casi 600 mil a 390 mil has. este año.

“Los cañicultores están rumbo a la quiebra, pero corriendo aceleradamente, al igual que los arroceros y los maiceros si no hay un cambio inmediato en el tema de los ingresos (…) 

En café, peor; antes había 186 mil hectáreas y ya prácticamente para poder sobrevivir, los cafetaleros han tenido que intentar con hortalizas, ganado o cualquier otra actividad. 

Los cafetaleros dicen que su apellido se acaba en esta tercera generación, porque no tienen relevo en la agricultura. Ahí hay que reflexionar”, expresó.

Debido a que los rubros de caña de azúcar y arroz han sido analizados en anteriores asambleas, en la actividad de ayer los agricultores se centraron en estudiar la estructura de costos del maíz, concluyendo que producir una hectárea requiere una inversión de 71.542,73 bolívares, lo que da un precio de Bs. 22,71 por kilo del rubro, al que se le agrega un 30% de rentabilidad para un total de Bs. 29,53 que es el monto que Fedeagro está solicitando para la venidera cosecha del ciclo invierno 2015.

Pestana señaló que los venezolanos no deben preocuparse por ese incremento en el valor del maíz a nivel del productor, indicando que más bien ha sido con la fijación de “precios irrisorios que no cubren ni siquiera el 50% de la estructura de costos de producción del sector” como se ha disminuido la producción, generando la escasez y el “mercado negro” en torno a los rubros alimenticios, inclusive en estados como Portuguesa donde sale el 52% del azúcar, 49% del maíz y más del 65% del arroz que se cosecha en Venezuela.

Una rentabilidad a nivel del sector primario, va a significar que los agricultores tendrán capacidad de invertir y producir más, disminuyendo los precios a nivel de consumidor y aumentando la oferta en el mercado, según el presidente de Fedeagro, para quien “ver a los venezolanos en cola, para nosotros no es ningún orgullo”.

El presidente de Fedeagro criticó el próximo arribo de seis buques de maíz blanco y tres de arroz cuando ya está por iniciar la cosecha. Aunque aprueba las importaciones complementarias, indicó que deben ser canalizadas para que no compitan con la producción nacional.

Por ello, los agricultores y la dirigencia del gremio acordaron activar acciones pacíficas -entre las que se incluye un posible “tractorazo”- en todo el país, para explicarles su situación a los venezolanos y defender los derechos no de un solo rubro, sino de todos.

Un despertar

Ramón Elías Bolotín, director de oleaginosas de Fedeagro, sostuvo que en este momento, todo apunta al despertar del agricultor y a exigir su condición de autoabastecer al país con lo hecho en Venezuela, al tiempo que cuestionó el cierre de la frontera colombo-venezolana ejecutada por el Gobierno, principalmente para evitar la fuga de alimentos por la vía del contrabando, considerando el dirigente agrícola que esta medida no ha tenido un impacto en el abastecimiento de alimentos a lo interno.