El Instituto de Salud Agrícola Integral (Insai) asegura que la causa de la pudrición de ciertos lotes se debió a un mal almacenamiento de los granos.
Gleixys Pastrán C El Mundo
El presidente de la Federación Nacional de Productores de Papas y Horticultores de Venezuela (Fenaprohorp), Publio Paredes, en una asamblea efectuada ayer en el estado Lara, fijó posición sobre las declaraciones de Raúl Fernández, presidente del Instituto Nacional de Salud Agrícola Integral (Insai), al tiempo que explicó las razones por las que algunos lotes de semillas de papa llegaron al país dañados.
“Para nosotros, que tenemos más de 70 años produciendo el tubérculo para nuestro país, esas declaraciones constituyen un insulto y una bofetada a los paperos larenses y carabobeños. Es muy difícil que a estas alturas alguien pueda enseñarnos algo que conocemos absolutamente en la práctica como lo es el almacenamiento de este rubro alimenticio”, expresó Paredes en la asamblea.
“Para nosotros, que tenemos más de 70 años produciendo el tubérculo para nuestro país, esas declaraciones constituyen un insulto y una bofetada a los paperos larenses y carabobeños. Es muy difícil que a estas alturas alguien pueda enseñarnos algo que conocemos absolutamente en la práctica como lo es el almacenamiento de este rubro alimenticio”, expresó Paredes en la asamblea.
A través de un comunicado enviado a El Mundo, Economía y Negocios, el presidente del Insai afirmó que “el flagelo (de las semillas podridas) que se originó en Carabobo, específicamente en el sector de Chirgua, fue por mal almacenamiento y un manejo inadecuado, lo que provocó que algunas papas se pudrieran; sin embargo, Insai y Agropatria realizaron inspecciones en conjunto”.
Paredes, en representación de los productores de papa afectados por las semillas descompuestas, asegura que ellos tienen fotos que demuestran que ya venían dañadas desde Canadá.
“Es importante señalar que funcionarios del MAT prometieron a los productores ir a inspeccionar en los puertos la calidad de las semillas, lo cual nunca cumplieron, pues nos negaron el acceso. Sin embargo, cuando entregaron los sacos de papa estos ya estaban húmedos, razón por la cual las semillas se pudrieron”, explicó el presidente de Fenaprohor.
Por otra parte, el Insai explicó en su comunicado que las semillas que importó Agropatria “sí cumplían con las condiciones fitosanitarias establecidas en los protocolos para la importación de tubérculos”, además, aseguró que se efectuaron las inspecciones tanto en el país de origen (Canadá) como cuando arribaron a Venezuela, “verificando que ambos buques cumplieran con las condiciones exigidas”.
A pesar de estas declaraciones oficiales, los paperos acordaron instalar asambleas sectoriales a escala nacional “para denunciar con pruebas en mano que el ingeniero Raúl Fernández (presidente del Insai) no dice la verdad”, señaló Paredes.
“La primera reunión la realizamos en el municipio Andrés Eloy Blanco, en Sanare, estado Lara. Allí designamos comisiones para trasladarnos hasta la Asamblea Nacional y entregar un comunicado con las pruebas”.
El presidente de Fenaprohorp indicó que los cultivadores de papa están en sesión permanente ante las declaraciones del presidente del Insai. Prometió que demostrarán el “irregular manejo de las importaciones de semillas de papa” desde Canadá, compras que se hicieron el año pasado .
La empresa canadiense
Di Jennkins Inghan Asociated es el nombre de la empresa canadiense a través de la cual se importaron las 7.500 toneladas de semillas en el mes de diciembre de 2014.
Di Jennkins no es directamente una compañía productora, sino una exportadora de productos vegetales. Dentro del informe de pruebas de los paperos nacionales están los sacos con el nombre de esta empresa intermediaria que, según ellos, por primera vez participa en el país en la importación de este producto.
Lo que causa suspicacia a los paperos larenses y carabobeños es por qué Agropatria le compró semillas a una intermediaria, si se supone que la transacción debió haber sido directamente con los productores que tradicionalmente le venden a Venezuela este producto.
“¿Por qué si Agropatria es persona jurídica y está autorizada para importar, qué motivó a que se utilizara esta intermediaria para traer la semilla?”, se preguntó el presidente de la Federación Nacional de Paperos y Hortalizas.
Paredes, en representación de los productores de papa afectados por las semillas descompuestas, asegura que ellos tienen fotos que demuestran que ya venían dañadas desde Canadá.
“Es importante señalar que funcionarios del MAT prometieron a los productores ir a inspeccionar en los puertos la calidad de las semillas, lo cual nunca cumplieron, pues nos negaron el acceso. Sin embargo, cuando entregaron los sacos de papa estos ya estaban húmedos, razón por la cual las semillas se pudrieron”, explicó el presidente de Fenaprohor.
Por otra parte, el Insai explicó en su comunicado que las semillas que importó Agropatria “sí cumplían con las condiciones fitosanitarias establecidas en los protocolos para la importación de tubérculos”, además, aseguró que se efectuaron las inspecciones tanto en el país de origen (Canadá) como cuando arribaron a Venezuela, “verificando que ambos buques cumplieran con las condiciones exigidas”.
A pesar de estas declaraciones oficiales, los paperos acordaron instalar asambleas sectoriales a escala nacional “para denunciar con pruebas en mano que el ingeniero Raúl Fernández (presidente del Insai) no dice la verdad”, señaló Paredes.
“La primera reunión la realizamos en el municipio Andrés Eloy Blanco, en Sanare, estado Lara. Allí designamos comisiones para trasladarnos hasta la Asamblea Nacional y entregar un comunicado con las pruebas”.
El presidente de Fenaprohorp indicó que los cultivadores de papa están en sesión permanente ante las declaraciones del presidente del Insai. Prometió que demostrarán el “irregular manejo de las importaciones de semillas de papa” desde Canadá, compras que se hicieron el año pasado .
La empresa canadiense
Di Jennkins Inghan Asociated es el nombre de la empresa canadiense a través de la cual se importaron las 7.500 toneladas de semillas en el mes de diciembre de 2014.
Di Jennkins no es directamente una compañía productora, sino una exportadora de productos vegetales. Dentro del informe de pruebas de los paperos nacionales están los sacos con el nombre de esta empresa intermediaria que, según ellos, por primera vez participa en el país en la importación de este producto.
Lo que causa suspicacia a los paperos larenses y carabobeños es por qué Agropatria le compró semillas a una intermediaria, si se supone que la transacción debió haber sido directamente con los productores que tradicionalmente le venden a Venezuela este producto.
“¿Por qué si Agropatria es persona jurídica y está autorizada para importar, qué motivó a que se utilizara esta intermediaria para traer la semilla?”, se preguntó el presidente de la Federación Nacional de Paperos y Hortalizas.
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