Recuperación de costos agrícolas dependerá del pago de subsidios

MARÍA BEATRIZ PARILLI   Ultima Hora Digital

El Gobierno nacional publicó el ajuste de los precios del maíz, arroz, café y caña de azúcar, a través de subsidios, de cuya eficiencia en el pago depende que los agricultores recuperen los costos en algunos de estos rubros.

A los agricultores que cosecharon caña de azúcar en la pasada zafra 2014-15, se les aprobó un subsidio de 8 bolívares que se adicionan al precio de Bs. 13 que percibieron durante la molienda en este período, mientras que al arroz paddy del ciclo norte-verano 2014-15 se le autorizó una subvención de Bs. 10,4 que sumado a un precio de Bs. 8,60, da un total de Bs. 19.

Aquiles Hopkins, vicepresidente Fedeagro, señaló que con estos subsidios se reconoce el “justo” reclamo que han venido haciendo los gremios agrícolas, destacando que aunque estos ingresos debieron aprobarse para el primer trimestre del año “más vale tarde que nunca”, por lo que ahora esperan que el pago sea lo más ágil posible, ante la escalada inflacionaria que se vive en la actualidad.

Adicionalmente, el Gobierno aprobó un subsidio de Bs. 19,19 para la cosecha de arroz paddy que se realice desde el 1º de julio hasta el 18 de septiembre de este año.

Para el ciclo invierno 2015, el precio del maíz amarillo fue aumentado a 22 bolívares, el maíz blanco quedó en Bs. 15 y el arroz paddy húmedo en Bs. 16,80, montos que -según el dirigente agrícola- están por debajo de las estructuras de costos consignadas por los gremios de productores, que solicitaban entre Bs. 29,50 y más de Bs. 32 para estos rubros.

Sin embargo, para el ciclo invierno se autorizó un subsidio de Bs. 7 al maíz blanco y Bs. 11 al arroz paddy, lo que da un ingreso total de Bs. 22 y Bs. 27,30, respectivamente, ante lo cual Hopkins pidió agilidad y efectividad en el mecanismo de cobro de la subvención, para no recargarla sobre las espaldas de los agricultores, quienes son el vehículo para que los productos finales lleguen más baratos a los consumidores.

El vicepresidente de Fedeagro destacó que el ingreso total que percibirán los agricultores por la cosecha de maíz y arroz en el ciclo invierno, no permiten una rentabilidad sino únicamente recuperar los costos de producción, lo que solo será posible mediante la efectividad en el pago del subsidio.

Ante este panorama, el dirigente afirmó que “tenemos dos caminos exclusivos para que no desaparezca la producción primaria: o nos dan rentabilidad por la vía del precio o nos brindan las herramientas para que seamos más productivos, y esto solo se hace mediante el uso de tecnología de punta y biotecnología, la cual no se nos permite usar a pesar de que la consumimos mediante el maíz y soya que importa el país. También nos deben permitir el acceso a la maquinaria, ya que la oferta escasamente alcanza el 20% de nuestras necesidades anuales”.

No obstante, al respecto Gustavo Moreno Lleras, vicepresidente de Asoportuguesa, manifestó que la modificación de los precios que inicialmente aprobó el Gobierno “es una manera de reconocer el trabajo de los agricultores y el compromiso de los gremios en poder demostrar lo que han sido los efectos de la inflación en los costos de producción y la necesidad de tener un mínimo de rentabilidad para una actividad económica que genera alimentos para todos los venezolanos”, apuntó.

Café

En el caso del café, el Gobierno también modificó los precios y clasificaciones que anunció inicialmente, oficializando las categorías de lavado superior, lavado, natural bueno y natural corriente, cuyos precios fueron fijados en Bs. 15.120, Bs. 15.000, Bs. 13.000 y Bs. 9.000 por quintal, respectivamente.

Pedro Vicente Pérez, director de Fedeagro, enfatizó que los nuevos precios no ayudan a estimular el aumento de la cosecha, pero sí pueden evitar que siga cayendo la producción, para cuyo estímulo cree necesario que se apruebe una prima por calidad, la cual se debe corresponder con el producto final a nivel de anaquel.

Tardío

En cuanto a la caña de azúcar, el presidente de Socaportuguesa, Oscar Contreras, manifestó que el subsidio de Bs. 8 coincide con lo que se solicitaba el año pasado para compensar los costos de producción, pero la medida llega de manera tardía, razón por la cual ese ingreso se volverá “sal y agua” que se irá en el pago de compromisos contraídos con anterioridad y para terminar de cancelarles a los nucleros. “Esperamos que se defina pronto el precio para el arranque de la próxima zafra y que se nos dé respuesta con respecto a los repuestos y maquinaria que necesitamos”, acotó.