Racionamiento oficializado

Es imperativo impulsar decididamente el campo y la producción nacional.

PEDRO E. PIÑATE B. |  EL UNIVERSAL

Con un simple cartel en la puerta de sus detales de alimentos, desde el 10 de febrero, Pdval informa a sus "Estimados clientes" que las ventas serán controladas, mediante la cédula laminada la cuál deberá ser presentada al cancelar y sólo podrán comprar los días que les correspondan según el último número de la cédula de identidad, a continuación detallamos el control de acceso: lunes 1 y 2, martes 3 y 4, miércoles 5 y 6, jueves 7 y 8, viernes 9 y 0, sábado libre". 

Esta severa restricción a las compras de alimentos por Pdval a un sólo día de la semana, constituye sin duda una medida oficial de racionamiento, confirmando la gravedad de la escasez que alcanza al mayor ente gubernamental responsable de la distribución social de alimentos.

Siendo el desabastecimiento de alimentos principal elemento de la protesta que sacude al país, el racionamiento oficializado por Pdval, marca el comienzo de una muy difícil etapa de la crisis nacional, donde la escasez atiza más el conflicto social al límite de lo inmanejable. 

De allí que el gobierno como responsable de los programas sociales de alimentos, debe abocarse a la solución del desabastecimiento con la urgencia que la situación exige. En ese sentido, es esencial entender que la importación masiva de alimentos por si sola no resuelve la escasez. 

Por tanto es imperativo impulsar decididamente el campo y la producción nacional, dejando al sector productor privado cumplir su rol.

Mientras la responsabilidad de Pdval no debe ser subestimada al manejar directamente 20% de la distribución de alimentos del sector público. 

Con sus detales operando bajo racionamiento oficializado, la presión de los compradores sociales se traslada más al sector privado de alimentos, incapacitado por el gobierno para importar y menos producir sin divisas y bajo controles asfixiantes.