Central El Palmar cumple 60 años produciendo azúcar

Durante el acto de celebración, se otorgaron reconocimientos a trabajadores fundadores que aún están activos en el central.

El Universal

Con una eucaristía, a la que asistieron los trabajadores, la familia accionista, la junta directiva y autoridades locales, se dio inicio a la celebración del 60 aniversario de Central El Palmar, productor de azúcar Montalbán.

Luego de 60 años, El Palmar tiene grandes retos por delante para los cuales se prepara con optimismo. 

Su compromiso es seguir brindando aportes a la industria nacional, que se materializarán con las 18 mil 874 toneladas de azúcar de caña asociadas a la molienda de 242 mil toneladas de caña de azúcar a ser arrimadas al central, en el marco de la zafra que se inició el pasado 6 de enero, de acuerdo a lo indicado por el director agroindustrial, ingeniero Germán Sánchez.

Durante el acto de celebración del 60 aniversario, se otorgaron reconocimientos a los miembros de la familia Vollmer, así como a Pablo Aular, Antonio Suyama y Hernán Martínez, trabajadores fundadores y aún activos  en el central.

La historia de Central El Palmar, está ligada al desarrollo de la agroindustria del país, y en especial de San Mateo, en Aragua, lugar donde se asentó la que para 1956 y por varias décadas, sería la fábrica de azúcar más importante y grande del país y una de las más grandes  y modernas del Caribe, centro y sur América, tras la puesta en marcha del I Plan Azucarero Nacional con el cual se estimuló la inversión privada.

El 21 de enero de 1956,  un poco más de 150 cañicultores de la zona, molieron la caña cultivada en unas 6 mil hectáreas en donde se había establecido la planta diseñada por el ingeniero puertorriqueño  Antonio Ortiz Toro. 

La capacidad  de molienda inicial fue de 3600 toneladas, la mayor del país para el momento. 

Actualmente, la capacidad de molienda es de 8 mil toneladas diarias.

Central El Palmar es un ejemplo de constancia y dedicación. 

Son muchas las adversidades que ha vivido esta industria en su trayectoria; los valores que definen su cultura, el arraigo al suelo venezolano, su deseo de reinventarse de cara al siglo XXI y la firme convicción en que el país puede ser autosuficiente en la producción de azúcar en el mediano, son los motores que hoy animan a seguir adelante a los cerca de mil trabajadores directos y más de 2 mil indirectos que hacen vida en El Palmar , comentó el ingeniero Sánchez.