Aún sin materializarse pago del subsidio a la leche cruda
María Beatriz Parilli Ultima Hora Digital
El subsidio aprobado al litro de leche cruda arrimada a las plantas
pasteurizadoras, aún no se ha materializado, pese a que su pago se comenzaría a
realizar en la última semana de septiembre, según se había comprometido el
propio ministro de Agricultura y Tierras (MAT), Yván Gil.
Manuel Cipriano Heredia, presidente de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga), aseguró que “no se le ha visto el queso a la tostada” a la ayuda económica que hasta los momentos no se ha hecho efectiva por motivos desconocidos por el sector.
Para el pago de la subvención, el presidente Nicolás Maduro aprobó un aporte de 630 millones de bolívares al Fondo de Estímulo al Agricultor, según había especificado el titular del MAT, al referir que esta compensación sería cancelada al litro de leche cruda arrimada a las plantas procesadoras UHT y pasteurizadas.
Esta medida fue percibida como una discriminación por el sector pecuario, ya que no se incluye a la leche cruda arrimada a la industria quesera, la cual percibe alrededor del 70% de la producción nacional que se estima está cercana a los 4.5 millones de litros por año.
Heredia aseguró que los productores pecuarios están “ahogados”, no sólo porque el subsidio continúa sin materializarse, sino debido a que este beneficio es insuficiente para cubrir los costos de producción, que se calculan con base a los gastos por concepto de insumos, alza de sueldos y salarios, entre otras variantes.
De acuerdo con cifras del Banco Central de Venezuela (BCV), los productos pecuarios registraron un alza de 135% en un año, lo que para el presidente de Fedenaga, afecta en gran medida a los ganaderos que son obligados a trabajar con precios controlados en la carne y la leche, y que se quedan “cortos” ante la constante alza del valor de los insumos como los alimentos concentrados para animales.
A este factor se adiciona que incluso con el subsidio aprobado por el Ejecutivo, el ingreso de los productores no se corresponde con lo sugerido por el sector, ya que hasta mayo de este año se calculaba que el precio del litro de leche cruda debía estar en 12,29 bolívares en promedio.
No obstante, con la subvención económica, el ingreso total será de 7,50 bolívares, aunque en el caso de los productores que arrimen a la planta de Machiques (estado Zulia), será de 9,50 bolívares, ya que el Ejecutivo les aprobó una compensación de 5 bolívares.
El trabajo a pérdida de los ganaderos se ha traducido en la disminución de la producción de carne y leche. El presidente de Fedenaga denunció que entre enero y agosto, en leche en polvo proveniente de Uruguay ha habido un incremento de 169% en las importaciones.
“Hay aumento en las importaciones de leche en polvo, pero -sin embargo- nosotros nos preguntamos dónde están estos productos porque en el mercado casi no se ven. En el caso de la carne, hasta julio las compras foráneas de Brasil disminuyeron un 10% en el caso de animales vivos, pero aumentaron 75% en lo que respecta a carne congelada”, dijo.
Positivo
Pese a estas limitaciones, Heredia ve con buenos ojos el convenio firmado entre el Gobierno nacional y la Fundación Nadbio, para la ejecución del Programa de Fomento Lechero Nacional (Pidel), en el que se contempla aumentar a seis años la producción a 1.728.000.000 de litros de leche.
El programa lechero será aplicado en cinco ejes, conformados por los estados Anzoátegui, Monagas y Bolívar, por la zona oriental; Guárico y Apure; Barinas y Táchira; Trujillo, Mérida y Zulia, y por la región centroccidental Cojedes, Portuguesa, Lara, Yaracuy y Falcón.
“Creemos que este tipo de plan es el que se tiene que implementar en el país (…) Aunque lleva su tiempo, ojalá que podamos incrementar la producción nacional y que el programa se mantenga en el tiempo como se ha venido llevando a cabo en estados como Lara, Yaracuy y Monagas, aunque a pequeña escala”, afirmó.
Inconvenientes
El presidente de Fedenaga, también se refirió al déficit de maquinaria y repuestos que ya ha sido elevada por distintos gremios agrícolas que se han quejado por las limitaciones que tienen para desarrollar las labores en el campo, situación que podría agudizar el estancamiento en la producción y su posterior caída.
Manuel Cipriano Heredia enfatizó que aparte de la falta de repuestos y maquinaria que se generan por la falta de dólares para importarlas, se suman las dificultades para conseguir combustible para poner operativas los pocos equipos que se tienen disponibles.
Manuel Cipriano Heredia, presidente de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga), aseguró que “no se le ha visto el queso a la tostada” a la ayuda económica que hasta los momentos no se ha hecho efectiva por motivos desconocidos por el sector.
Para el pago de la subvención, el presidente Nicolás Maduro aprobó un aporte de 630 millones de bolívares al Fondo de Estímulo al Agricultor, según había especificado el titular del MAT, al referir que esta compensación sería cancelada al litro de leche cruda arrimada a las plantas procesadoras UHT y pasteurizadas.
Esta medida fue percibida como una discriminación por el sector pecuario, ya que no se incluye a la leche cruda arrimada a la industria quesera, la cual percibe alrededor del 70% de la producción nacional que se estima está cercana a los 4.5 millones de litros por año.
Heredia aseguró que los productores pecuarios están “ahogados”, no sólo porque el subsidio continúa sin materializarse, sino debido a que este beneficio es insuficiente para cubrir los costos de producción, que se calculan con base a los gastos por concepto de insumos, alza de sueldos y salarios, entre otras variantes.
De acuerdo con cifras del Banco Central de Venezuela (BCV), los productos pecuarios registraron un alza de 135% en un año, lo que para el presidente de Fedenaga, afecta en gran medida a los ganaderos que son obligados a trabajar con precios controlados en la carne y la leche, y que se quedan “cortos” ante la constante alza del valor de los insumos como los alimentos concentrados para animales.
A este factor se adiciona que incluso con el subsidio aprobado por el Ejecutivo, el ingreso de los productores no se corresponde con lo sugerido por el sector, ya que hasta mayo de este año se calculaba que el precio del litro de leche cruda debía estar en 12,29 bolívares en promedio.
No obstante, con la subvención económica, el ingreso total será de 7,50 bolívares, aunque en el caso de los productores que arrimen a la planta de Machiques (estado Zulia), será de 9,50 bolívares, ya que el Ejecutivo les aprobó una compensación de 5 bolívares.
El trabajo a pérdida de los ganaderos se ha traducido en la disminución de la producción de carne y leche. El presidente de Fedenaga denunció que entre enero y agosto, en leche en polvo proveniente de Uruguay ha habido un incremento de 169% en las importaciones.
“Hay aumento en las importaciones de leche en polvo, pero -sin embargo- nosotros nos preguntamos dónde están estos productos porque en el mercado casi no se ven. En el caso de la carne, hasta julio las compras foráneas de Brasil disminuyeron un 10% en el caso de animales vivos, pero aumentaron 75% en lo que respecta a carne congelada”, dijo.
Positivo
Pese a estas limitaciones, Heredia ve con buenos ojos el convenio firmado entre el Gobierno nacional y la Fundación Nadbio, para la ejecución del Programa de Fomento Lechero Nacional (Pidel), en el que se contempla aumentar a seis años la producción a 1.728.000.000 de litros de leche.
El programa lechero será aplicado en cinco ejes, conformados por los estados Anzoátegui, Monagas y Bolívar, por la zona oriental; Guárico y Apure; Barinas y Táchira; Trujillo, Mérida y Zulia, y por la región centroccidental Cojedes, Portuguesa, Lara, Yaracuy y Falcón.
“Creemos que este tipo de plan es el que se tiene que implementar en el país (…) Aunque lleva su tiempo, ojalá que podamos incrementar la producción nacional y que el programa se mantenga en el tiempo como se ha venido llevando a cabo en estados como Lara, Yaracuy y Monagas, aunque a pequeña escala”, afirmó.
Inconvenientes
El presidente de Fedenaga, también se refirió al déficit de maquinaria y repuestos que ya ha sido elevada por distintos gremios agrícolas que se han quejado por las limitaciones que tienen para desarrollar las labores en el campo, situación que podría agudizar el estancamiento en la producción y su posterior caída.
Manuel Cipriano Heredia enfatizó que aparte de la falta de repuestos y maquinaria que se generan por la falta de dólares para importarlas, se suman las dificultades para conseguir combustible para poner operativas los pocos equipos que se tienen disponibles.
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